viernes, 16 de abril de 2021

Lucha con los avivatos*


 Contratos entregados a dedo, muchos miles de millones de pesos, celebrados por algunos gobernantes regionales y locales, investigan la Contraloría, la Fiscalía y la Procuraduría.
‘Ratas de alcantarilla’ llamó el presidente Iván Duque a quienes se llenan los bolsillos con las ayudas para las poblaciones más vulnerables.
Departamentos como Arauca, Chocó, Guaviare, La Guajira y Tolima; y alcaldías como Armenia, Barranquilla, Calarcá, Melgar, Puerto Colombia y Puerto Gaitán; han sido denunciados, y son investigados por los entes de control.
Los departamentos de Atlántico, Cesar, Magdalena, San Andrés y Valle del Cauca; y los municipios de Cajicá, Cúcuta, Guaduas, La Palma, y Neiva; completan la lista donde se enfocan esfuerzos para determinar irregularidades como sobrecostos y falta de licitaciones. 
Del mismo modo se investiga el desvío de recursos del programa Ingreso Solidario del que, subsidios para tres millones de personas, se perdieron más de 200.000 millones de pesos.
“Es brutal el grado de desfachatez de los ladrones del bienestar de la gente. (…) No vamos a permitir que el hambre de los más vulnerables se convierta en gula de los corruptos”.
(Procurador Fernando Carrillo).
* Resumen fielmente extractado de la revista Semana, edición n.ºs 1.981 y 1.982
                                                                                …
• En este escándalo hay algo inaudito: el Decreto 518 del 2020 –firmado por Duque– que creó el programa Ingreso Solidario, blindó judicialmente a los encargados de aplicarlo: “No conlleva responsabilidad de quienes participen en su implementación”. De lo que se colige que –como siempre– estas investigaciones se quedarán engavetadas, sin sancionar a los responsables.

Pos- y post-

      

• El prefijo ‘pos’ es inseparable:
posadjudicación
poscuarentena
posconfinamiento
posoperatorio
pospandemia
• Ante un nombre compuesto se escribe separado:
pos conflicto armado
pos Edad Media
pos guerra civil
• Ante un nombre propio se escribe pegado y con guión:
pos-Rembrandt
pos-Renacimiento
• Se usa la forma latina ‘post’ (también inseparable) solo cuando la palabra a la que se une comienza por la letra 'ese':
postsindical
postsocialismo
postsoviético
postsurrealismo

De "Majitus"

Al cumplir la edad reglamentaria, me presenté al Seguro Social para tramitar la pensión por vejez.
La secretaria, detrás de la ventanilla, me pidió el pasaporte para verificar mi edad y mi identidad; busqué en todos los bolsillos; pero, finalmente caí en la cuenta de que lo había dejado en casa. Le dije a la señorita que lo sentía mucho, que no tenía ahí el documento, que más tarde regresaría.
La oficinista, entonces, me dijo:
¡Solo..., desabotónese la camisa!
Le mostré los abundantes pero canosos vellos del pecho, y me dijo:
Esos vellos canosos son prueba suficiente para mí.
Procesó mi solicitud, y... ¡me dio la pensión!
Cuando regresé a casa –muy emocionado– le conté a mi esposa lo sucedido. De inmediato ella comentó:
¡Ay, mijo...!, debiste bajarte los pantalones; ¡a lo mejor te hubieran dado, también, una... pensión por invalidez!

Para reflexionar

Otra buenísima anécdota de mi amigo Gabriel Escobar Gaviria, “Sófocles” (El Espectador).

Hace unos días lavé un vaso en el que había tomado una gaseosa, pero no tuve cuidado de lavar el lavamanos para que parte del dulce de la gaseosa no quedara en él. Más tarde regresé y encontré unas veinte hormigas pequeñísimas, no llegaban ni al milímetro de longitud. Puse el tapón y abrí la llave para llenar el lavamanos lentamente de tal manera que las hormigas al ver subir el agua salieran de allí, sin que ninguno de esos diminutos seres muriera por culpa mía. 

Efectivamente, comenzaron a salir apresuradas. Cuando faltaban cuatro por salir y una de ellas se enredó en una gota de agua que estaba más alta que el nivel donde venía el llenado; por más esfuerzo que hacía, no lograba salir de la gota, las otras tres estaban llegando a la salida. Cerré la llave para que el nivel del agua no siguiera subiendo. Mientras tanto pensaba cómo sacaría a la hormiga de ese lío. Estaba en ese pensamiento cuando veo que, de las tres, dos lograron la salida y la última se devolvió a la misma velocidad que había subido, llegó a la gota y trataba de sacar a la compañerita. Mientras tanto con la uña de mi dedo meñique logré sacarla de la gota y ponerla unos milímetros adelante, aun así, no lograba caminar. La que vino a salvarla se le acercó, algo le hizo, yo no vi qué ni me lo contaron, pero las dos subieron veloces para lograr la salida y yo pude lavar el lavamanos. 

Hay personas supuestamente inteligentes que dicen que esto lo hizo el azar. ¿Puede el azar dotar a una hormiga milimétrica de un cerebro capaz de deducir que una compañera está en peligro y acudir a salvarla aun con riesgo de su propia vida? Dichosos nosotros que podemos ver la inmensidad de Dios en el cerebro de una microhormiga.